Venustiano Carranza, en compañía de los generales Álvaro Obregón y Pablo González, abanderó a los alumnos del Internado Nacional. En la ceremonia, el encargado del Poder Ejecutivo comentó la importancia de la educación militar, pues con ello cada hijo de la patria se transformará en un soldado para defenderla.

         El contexto nacional e internacional en 1916 era particularmente difícil para nuestro país. La Expedición Punitiva continuaba en nuestro territorio y la Gran Guerra se extendía por Europa, al igual que las presiones para que México se involucrara en la conflagración. Aunque Carranza mantuvo la neutralidad de México y la defensa de nuestra soberanía, promovió la educación militar y la formación de un ejército profesional bien organizado y patriota, de manera preventiva.

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