En Adiós Carlota, el público percibe la condición humana de un personaje histórico durante los últimos días de su existencia.  

Se trata del espectáculo silente protagonizado por títeres hiperrealistas, el cual regresa al Castillo de Chapultepec a partir del 9 de abril, tras una exitosa temporada en diciembre pasado.

“Carlota vive abrumada por los fantasmas del pasado, los espectadores no saben si lo que ven en escena son sus recuerdos, sus sueños o sus alucinaciones”, explicó en conferencia de prensa, el creador y director de esta propuesta, Gerardo Ballester.

Destacó que pese a ser marionetas, no es un espectáculo para niños y está dirigido a adolescentes y adultos, ya que contiene imágenes en movimiento contadas de manera onírica.

Es así como una Carlota anciana se confronta con sus recuerdos y los momentos más importantes que pasó al lado de su esposo, Maximiliano de Habsburgo.

Ella sufre y llora en medio de su realidad, mientras es cuidada por su doncella Matilde, para luego transitar por momentos de felicidad y añoranza por el amor de su vida.

La obra no tiene diálogos, por lo que la pianista Deborah Silberer es la encargada de recrear diferentes atmósferas con una estética propia del siglo XIX.

Con piezas propias del periodo del romanticismo, a lo largo del montaje se escucha música como el vals Danubio azul y fragmentos de obras de Schubert.

“Mi labor es tratar de reproducir un ambiente que sea comprensible para el público… la música lleva los ritmos y puntos dramáticos”, dijo la creadora de origen rumano.

Gerardo Ballester y un equipo en el que se encuentra Andrea López, Guram Lubaggi y Mayela Gallardo mostraron la forma en que manipulan a los títeres que poseen mecanismos de gesticulación y movimiento de ojos.

Para lograr el hiperrealismo, las figuras poseen un esqueleto de aluminio, músculos formados por hule espuma y piel de silicón platinium, por lo que resultan un híbrido entre la técnica japonesa bunraku y los títeres de mesa, en cámara negra.

De acuerdo con Ballester, la idea del espectáculo surgió en una charla con Deborah Silberer, quien estaba interesada en realizar una obra muda y que tuviera imágenes tridimensionales.

“Compartíamos el gusto por el siglo XIX pero queríamos una historia relacionada con México y Europa y salió el personaje de Carlota, que con el estereotipo que tenemos todos sobre su locura nos abrió expectativas muy amplias… Fue una ardua investigación que incluyó lecturas como Noticias del imperio, de Fernando del Paso”.

El director del Museo Nacional de Historia, Salvador Rueda, expresó que el Alcázar del Castillo de Chapultepec resulta un escenario natural para esta obra y una excelente lección de historia, pues “a través de los vestigios podemos acercarnos a la memoria”.

Agregó que hay un punto dramático que nos hace pensar que la historia es una parte de la vida.

Adiós Carlota se presentará del 9 al 16 de abril y del 21 al 23 de abril a las 20 horas en el Museo Nacional de Historia, Castillo de Chapultepec. Boletos en Ticketmaster, taquillas del Museo Nacional de Historia, Museo Nacional de Antropología y el Palacio de Bellas Artes. Localidades: $250.

Información: CGP

Documentos

Descarga el PDF Kit de prensa