Las áreas verdes del Centro Nacional de las Artes se vistieron de manteles y libros, para festejar el Día Internacional del Libro Infantil y Juvenil con un “picnic literario” donde niñas, niños y sus papás, pudieron disfrutar de un festín de letras.

A Iniciativa de IBBY México/A leer y con apoyo de diversas instancias del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) se instalaron manteles y canastas con libros infantiles, en diversos formatos e idiomas, a fin de que los asistentes pasaran un día de campo literario.

Narraciones orales, cuenta-cuentos y talleres, fueron parte de las actividades para celebrar al Libro Infantil y Juvenil que, desde 1967, se conmemora el 2 de abril, fecha cercana al nacimiento del escritor Hans Christian Andersen.

El objetivo del festejo fue brindar un acercamiento lúdico a las letras y, de acuerdo a Azucena Galindo, directora de IBBY México, facilitar el derecho de acceder a la palabra escrita, ya que la literatura y la lectura, son una experiencia incluyente.

Por ello, en las 10 estaciones de picnic, los asistentes podían acercarse a libros infantiles con variadas propuestas y en diversas lenguas, e incluso se contó con intérpretes en Lengua de Señas Mexicana, para que todos pudieran disfrutar de la lectura y así visibilizar la diversidad.

Marina Núñez, de la Dirección General de Publicaciones, aplaudió la realización de esta novedosa iniciativa, ya que, dijo, hay que dinamizar este tipo de celebraciones, toda vez que al libro “se le celebra leyéndolo e incitando a otras personas a leer”.

Por su parte, la escritora de  libros infantiles Verónica Murguía, recordó que los libros para niños son diferentes al resto de los libros, ya que los destinados al público infantil son una obra total, que incluye ilustraciones y pensamientos que engloban todo, pues son para entretener, para divertir, para alentar, para mostrar, pero de una manera más incluyente.

A nombre de los escritores de libros infantiles, destacó que leer un libro bajo un árbol es, desde el siglo V a. C. una de las ocupaciones más agradables para la humanidad y que todo el mundo ha leído un libro a la sombra de un árbol.

Además de disponer de libros infantiles en las canastas que se encontraban en manteles de colores a lo largo de las Áreas Verdes del Cenart, los asistentes disfrutaron de lecturas en voz alta no sólo en español, sino también en otros idiomas, como son el alemán y el japonés.

Adicionalmente se impartieron seis talleres como El árbol de la palabra, con lectura de mitos e historias; Planeta Acuaponia donde los asistentes sembraban una semilla y se podían enterar cómo funciona un ecosistema; de Lectura Bilingüe, tanto en español como en lengua de señas y el de Caligramas, poesía visual, en que el público elegía un poema que trasladaba a la estructura de un caligrama.

También hubo una sesión de terapia de risa y para finalizar, los asistentes pudieron disfrutar de la obra Picnic en el país de las maravillas, del programa Alas y Raíces del Conaculta, que combina lectura en voz alta de fragmentos del cuento de Alicia con improvisaciones teatrales.

Azucena Galindo indicó que el objetivo de esta celebración es que pueda replicarse en otras ciudades, a fin de que la lectura se convierta en una fiesta que convoque al encuentro, ya que en las historias nos encontramos todos.

Y es que como señaló Marwa Al Aqroubi, escritora de Emiratos Árabes Unidos, que este 2015 fue la encargada de hacer el mensaje para esta conmemoración, “hablamos muchos idiomas y tenemos diferentes orígenes, pero compartimos las mismas historias”, que siempre tienen principio, trama y final, héroes, princesas y villanos, pero que “nos unen a todos en un país de misterio e imaginación. Y así todas las culturas se funden en una sola historia”.

Cabe señalar que IBBY México cuenta con la biblioteca infantil y juvenil más grande del país, la cual está abierta a todos los interesados en acercarse a este tipo de literatura en Goya 54, cerca del Metro Mixcoac.

Información: AGB

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